domingo, 31 de mayo de 2009

Ro, no podías haberlo transmitido mejor. Por eso te pido permiso para copiar tu entrada, y recordarlo aquí también.

"Estaba siempre en la barra, sobre todo los fines de semana cuando no trabajaba de noche, por la mañana empezaba a las seis. Recuerdo perfectamente su voz ronca, una treintena de años y risas que empezaban a las once de la noche con el whisky, con tabaco, whisky y tabaco. Las mejores noches era cuando cerrábamos el bar cantando, porque la verdad solo lo conocía de noche, y dentro del mismo sitio, que era nuestro, y que seguirá siendo nuestro. Nosotros seguiremos yendo allí, habrá un hueco en un taburete y quizás un vaso de sobra...Me decía con un golpe en la espalda: vete a estudiar!...Pasaba delante de mi casa deprisa, siempre caminaba deprisa.Te echaremos de menos, mañana no estaré con todos, lloraría más de lo que hubieras imaginado, pero haré lo posible por entender por qué pasó.No, mañana estaré allí, a las siete, escuchando como repican las campanas. "

D.E.P

No hay comentarios:

Publicar un comentario